Democracia bajo presión «Los politicos deberían tener que acumular méritos según los servicios prestados a la comunidad. Entonces podriamos votar por ellos»
Por la baja participación ciudadana 5,7% en las municipales. Ahora los parlamentarios quieren volver a la obligatoriedad de elegir a los representantes del pueblo. Todos los países que pasan del subdesarrollo al desarrollo viven las mismas experiencias, al principio somos desorganizados, la población crece y exigen mayores demandas, hasta que la gente aprende a convivir con una sociedad de acorde a las voluntades de todos los actores del sistema. Si comenzamos a analizar lo que nos está sucediendo en nuestro país. Lo primero que debemos preguntarnos es ¿Qué es el gobierno? Las palabras “gobierno”, «política», «poder» y «democracia», deben estar claramente definidas. La dificultad es que los cientistas políticos, intelectuales, filósofos, gobernantes y reyes nunca han sido capaces de llegar a un acuerdo completo sobre el significado de estos términos. El filósofo griego Platón y su discípulo Aristóteles especulan sobre su significado, y el proceso ha continuado hasta nuestros días. Teniendo en cuenta que no hay definiciones universales o un significado perfecto existente, todavía podemos discutir las palabras y llegar a un concepto general de lo que significan. Hoy tenemos un “Gobierno Democrático” y una “Sociedad cambiante”. El sistema político se relaciona con la gente, y el tamaño de la de la población afecta al sistema. De igual importancia es la naturaleza cualitativa de la población: quiénes son, dónde viven, cómo trabajan, cómo se mueven, y muchos otros factores nos afectan. Todos estos factores y muchos más nos hacen ver cómo el sistema político funciona, en otras palabras, podemos ver como el sistema es afectado en cierta medida en el marco social, económico y cultural que nos rodea. Como la sociedad cambia, las respuestas del gobierno probablemente cambien también. El Gobierno reacciona a los cambios básicos en la naturaleza de una sociedad, trata de adaptar los programas y la toma de decisiones para satisfacer las necesidades y las demandas cambiantes de los ciudadanos. Los cambios en la población también son muy importantes políticamente, por ejemplo, los datos del censo 2000 confirmó y revelo que el equilibrio de la población no había cambiado sustentablemente del censo anterior y ya vimos que nos dijo el fiasco del Censo anterior. “Nada”, todo esto muestra el impacto de las personas que tendrá en el Gobierno de turno y también como el gobierno afecto a la gente y lo más importante como los ciudadanos afectarán al gobierno. El sistema estadounidense de gobierno se basa en el concepto de que el poder viene del pueblo al gobierno. Thomas Jefferson lo expresó elocuentemente cuando escribió en la Declaración de Independencia que «Para garantizar estos derechos se instituyen Gobiernos entre los hombres, derivando a ser justos en los poderes del estado con el consentimiento de los gobernados.” Abraham Lincoln expresó el mismo pensamiento en su discurso de Gettysburg, al hablar del «gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo». Nuestro país debe hacer un análisis, urgente, para poder ver la relación: Gobierno y ciudadanos, marco constitucional, sistema democrático, libertades civiles y ciudadanía, discrepancias por los derechos civiles, igualitarios, opinión pública, grupos de interés, relación, medios de prensa y política, partidos políticos, campañas políticas y candidatos, conducta de los votantes y las elecciones, el rol del congreso, el presidente, la burocracia, justicia, relaciones internacionales y seguridad nacional, gobierno y sistema económico, promoviendo el bien general del país, y el estado con los gobiernos regionales. Esta es nuestra tarea; si logramos ordenar los conceptos. Entonces tendremos una democracia sin presiones y desacuerdos. Porque todos estaremos hablando el mismo idioma y avanzando tranquilamente con lógica y sentido común. Pero si las autoridades, políticas, judiciales, policiales, económicas, religiosas y todos no se ponen de acuerdo y toman decisiones por nosotros, entonces nunca vamos a poder salir del subdesarrollo. El único rol del gobierno es proteger, enriquecer (calidad de vida) y empoderar a sus ciudadanos. Pero él aparato está obsoleto y mediocre para los tiempos que vivimos. Mientras sigan los parlamentarios que también ya se acostumbraron a la buena vida. No tienen el derecho moral y menos ético de obligarnos hacer lo que ellos creen que es correcto. Porque no lo es.